Derecho Procesal Penal
En el proceso penal el litigio surge de la pugna existente entre el interés del Estado por hacer efectiva la pretensión punitiva que emana de la comisión del delito, y el interés de mantención de la libertad de aquellos en contra de quienes se dirige la imputación estatal. Consecuentemente, la pretensión punitiva, por una parte, y la pretensión de libertad, por la otra, son los elementos estructurantes de todo proceso penal.
Al cumplirse una década desde la entrada en vigencia parcial del actual sistema procesal penal, esta obra pretende servir como guía introductoria al estudio del proceso penal, entregando una mirada integral sobre él, sus instituciones, principios y objetivos. Para ello analiza descriptiva y normativamente las instituciones, integrando la necesaria referencia a la doctrina y la jurisprudencia, tanto de los tribunales ordinarios como del Tribunal Constitucional, que se ha pronunciado sobre algunos de sus aspectos más relevantes.
Este libro recoge en ocho capítulos los fundamentos, instituciones y procedimientos del proceso penal establecido por el Código Procesal Penal chileno.
El capítulo primero se refiere al proceso penal en general y a los distintos sistemas procesales existentes, abarcando el debido proceso, las características, fuentes, contenido, fines, principios y garantías del actual sistema chileno.
En el capítulo segundo se abordan, estructuran y desarrollan los diversos sujetos procesales, es decir, todos aquellos que se encuentran facultados para intervenir en la persecución penal. Se refiere por ende este capítulo al tribunal, al Ministerio Público, a la Policía, el imputado, la defensa, la víctima y el querellante.
El capítulo tercero trata de la acción dentro del proceso penal, tanto aquella de esta naturaleza, como la acción civil que emana de la comisión del ilícito.
El capítulo cuarto está reservado para la conceptualización y análisis de la competencia en materia penal y a las disposiciones comunes a todo procedimiento, los plazos, notificaciones y citaciones judiciales y del Ministerio Público, el registro de las actuaciones y las resoluciones judiciales.
En el capítulo quinto se desarrollan y analizan las medidas cautelares en el proceso penal, la garantía afectada por ellas, su relación con el principio de inocencia, los principios que las rigen y el estudio en particular de la citación, la detención, la prisión preventiva, las medidas cautelares de menor intensidad y aquellas cautelares de tipo real. El capitulo sexto desarrolla en detalle el procedimiento ordinario por crimen o simple delito de acción penal pública y sus diversas etapas, los principios de actuación del Ministerio Público y las distintas decisiones de éste que pueden afectarle, las formas de darle inicio, los medios de control del ejercicio de la acción, el principio de oportunidad y las salidas alternativas, la etapa de preparación del juicio oral, el juicio oral y la sentencia.
En el capítulo séptimo se abordan diversos aspectos relacionados con la prueba, los grados de conocimiento, los medios establecidos para el control de la convicción, el debido proceso, los principios formativos, el objeto y limitaciones de la prueba y su carga, el procedimiento probatorio, los diversos sistemas de prueba y los distintos medios de prueba consagrados por el legislador.
El capítulo octavo se hace cargo de entregar las nociones básicas acerca de algunos procedimientos especiales, tanto de aquellos propiamente tales, como los denominados procedimientos previos o antejuicios.
Dentro de los primeros, se describe el procedimiento abreviado, el procedimiento simplificado, el procedimiento monitorio, el procedimiento por crimen o simple delito de acción penal privada. Dentro de los segundos, se analiza el procedimiento relativo a personas que gozan de fuero constitucional, la querella de capítulos, la extradición y la situación del imputado enajenado mental.
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